nunca dejes de escribir cuando ya no se te ocurra nada

jueves, 17 de enero de 2008

inicio de una escritura

Acercandome a la hora de retirarme del trabajo, tengo ganas de escribir unas lineas sobre la soledad que estoy viviendo estoas días.
Me encuentro en una ciudad desierta, abandonada, fría y sin agua. No ocurre ningún evento importante, no pasa nada alrrededor de mi cabeza. Las ideas surgen de la poca imaginación que hay dentro de mi mente.
Es una gran mezcla de sentimientos encontrados hoy o ayer o antes de ayer.
Extraño el tiempo libre, sola y acompañada. Extraño las caricias por la mañana. Extraño despertar acurrucada en mi cama, con mis suaves sábanas, metida en los brazos de él, escuchando el cantito de los pocos pajaritos que hay en mi patio y sin que suene el maldito celular al lado de mi sensible oído.
Definitivamente estoy en un momento de mi vida que me siento como esta ciudad. Como vacía, pero al mismo tiempo estoy rodeada de muchas personas magníficas que están ahí siempre.
Este vacío es puramente extraño, sí, como si nunca lo hubiese vivido.
Es ahora, es hoy, ¿será mañana?.
La palabra clave es: extrañar. Mis amigos son aquellos "culpables" y/o "responsables" de este raro sentimiento.

Seguiré viva.